Lo cotidiano, a menudo, resulta desapercibido porque siempre está junto a nosotros: repitiéndose, pasando como rutina… Por ejemplo: un amanecer, las calles, las estaciones que llegan, nuestro mundo interior… Todo pasa y lo hace: tan llano, inadvertido, en un mundo de mayores velocidades y apuros a cada día.
“Mi Cita con la Luna” es un canto que nos invita a sentir lo que tal vez habíamos olvidado. Quizá es un intento de mostrar el valor y el milagro de todo lo que nos rodea o vive dentro de nosotros, incluso con sus aparentes contradicciones.
Haciendo un rápido recorrido por el libro, extraemos unas muestras. “Y burlando a la noche, las flores invencibles, apagaron sus colores y encendieron sus aromas (De: Una muchedumbre de flores)…” O: “Y las ruedas, como astros en celo, giran, brillosas, al encuentro de las distancias que ellas mismas crean y, a la vez, destruyen”.
Es una búsqueda constante de llegar a un conocimiento; se ensayan múltiples definiciones y, en el camino, surge un lenguaje propio: “Disfruto del instante que chispea, como peces en el aire, y me obsequia su efímero y continuo presente, como el río: que siempre se va, pero, a la vez, permanece allí, quieto en su fluir inacabable”.
——————————————————–
La versión ebook está disponible en esta página Amazon
Valoraciones
No hay valoraciones aún.